El Instituto Bíblico Buenos Aires
El Instituto Bíblico Buenos Aires, fue fundado por los misioneros Samuel y Vera Barnes pertenecientes a la Alianza Cristiana y Misionera. La historia comienza en la ciudad de Azul, provinicia de Buenos Aires, en 1922, que en su inicio se dio a conocer como Instituto Bíblico Azul (IBA). Este ministerio nace como una necesidad de preparar pastores para las iglesias nacientes.
Años más tarde, en 1946, se traslada a la ciudad de Buenos Aires, es así que pasó a tener sus actividades en una vieja casona del barrio de Belgrano. Desde ese momento, es denominado como Instituto Bíblico Buenos Aires. Con mas de 100 años de mucha historia, formación académica de más de 7.000 líderes referentes en el mundo y sirviendo en la iglesia de Cristo, se sigue trabajando con la visión original de formar obreros para la tarea ministerial.
En la actualidad el IBBA ofrece formación de calidad y compromiso cristiano en Teología, formacion pastoral en carreras de grado y posgrado desde la sede central de la Alianza Cristiana y Misionera Argentina, en Buenos Aires, y en otros centros de extension distribuidos en diversos puntos del país y el exterior, en modalidades presencial u online.
Hoy posee una biblioteca con más de 30.000 ejemplares; actualizada bibliografía para poder ofrecer fuentes de estudio e investigación, no solo a los estudiantes de la institución sino a alumnos de otras instituciones e investigadores interesados en las problemáticas religiosas, la teología y la Biblia. Y lo sigue haciendo en el mismo camino de sus fundadores. Ofrecemos calidad académica, compromiso cristiano y apertura hacia las experiencias y valores de las más de 30 denominaciones cristianas y ministerios que confían en su trayectoria.
VISIÓN
Existimos para servir a la Iglesia de Cristo en la formación de sus líderes, en el desarrollo integral del ser, el saber y el hacer, para que ministren en el mundo de hoy.
MISIÓN
Capacitar y formar personas idóneas para desempeñar los distintos ministerios que señala la Palabra de Dios como indispensables para perfeccionar a la iglesia como cuerpo de Cristo, ofreciendo programas de capacitación actuales y pertinentes a la realidad de las necesidades de la iglesia contemporánea en nuestro país y donde se requiera.
DECLARACIÓN DE FE
1.– CREEMOS en un solo Dios, ininitamente perfecto, existiendo en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Deuteronomio 6:4 – Mateo 5:48 – Mateo 28:19 – Juan 4:24
- – CREEMOS en Jesucristo, la segunda persona de la Trinidad Divina. Que Él es eternamente uno con el que fue encarnado por la obra del Espíritu Santo y nació de la Virgen María. Dos natu- ralezas completas y perfectas fueron unidas en una persona, verdadero Dios y verdadero Hombre.
Isaias7:14 – Mt.1:20-23 – Lc.1:35-38 – Filipenses 2:6-11 1Ped 2:24 – 1 Pedro 3:18
- – CREEMOS que Jesucristo murió en la cruz por nuestros peca- dos, un sacriicio de sustitución, el justo por los injustos y todos los que en Él creen son justiicados por su sangre derramada. Resucitó de entre los muertos habiendo quebrantado para siempre el poder de la muerte, constituyéndose en primicia de la resurrección y que, con su cuerpo gloriicado, ascendió al cielo y está a la diestra del Padre y es nuestro sumo sacerdote, donde intercede por nosotros. Conforme a las escrituras, volverá otra vez a establecer en la tierra su Reino de justicia y paz.
Romanos 5:8-9 – Romanos 14:9 – 1 Corintios 15:4 – 1 Corintios 15:20;22-26 – Juan 3:16 – Hechos 1:11 – Romanos 8:34 – Hechos 2:23-24 – Hebreos 8:1 – Mateo 26:64 – Daniel 12:2.
4.– CREEMOS en el Espíritu Santo, la tercera persona de la Divina Trinidad, quien convence al mundo de pecado, regenera a los que se arrepienten de sus pecados y creen en Cristo como su Salvador personal; morando en ellos, santiicándolos y guiándolos a toda De esta forma está siempre presente y eicazmente activo en la vida de la Iglesia.
1 Corintios 1:30 – Hechos 2:38 – 1 Corintios 2:10-11 – Miqueas 3:8 –Mateo 28:19-20 – Juan 14:15-18, 26 – Juan 16:7-11.
5.– CREEMOS en la inspiración plenaria de la Biblia, por lo cual aceptamos que los sesenta y seis libros del Antiguo y Nuevo Testamento, han sido escritos bajo la inspiración del Espíritu Santo. Son una revelación completa de la voluntad de Dios respecto al ser humano para su salvación, constitu- yéndose en la única regla de fe y práctica cristiana.
2 Timoteo 3:15–17 – 2 Pedro 1:19–21 – Juan 17:17 – Proverbios 30:5 – Apocalipsis 22:18–
6 – CREEMOS que el ser humano fue creado a la imagen y semejanza de Dios; que cayó por desobediencia, incurriendo así tanto en muerte física como espiritual.
Todos los seres humanos nacen con naturaleza pecaminosa, y por lo tanto están separados de la vida de Dios, llegando a ser salvos únicamente, por la obra redentora del Señor Jesucristo, consumada en la cruz del Calvario, cuya sangre derramada tiene el poder de limpiar del pecado, otorgar el perdón, librar de la muerte y condenación, dando acceso a la vida eterna y al Reino de Dios.
El destino de los que rechazan la obra de Cristo en la cruz es la existencia eterna en sufrimiento consciente.
Génesis 1:26–27 – Génesis 3:1–24 – Romanos 3:23 – Romanos 5:12 – Romanos 5:19 – Romanos 6:23 – 1Corintios 15:20–23 – Apocalipsis 21:1–4 – Apocalipsis 21:8
7.– CREEMOS que la salvación para el ser humano fue provista por Dios por medio de Jesucristo desde la misma eternidad, para toda la humani- dad. Aquellos que se arrepientan y creen en Él aceptándole como su Se- ñor y Salvador, por la Fe son nacidos de nuevo por medio del Espíritu Santo, recibiendo el don de la vida eterna, lo que les lleva a ser hechos hijos de Dios.
Juan 3:5, 3:16, 3:36 – Juan 1:12 – Tito 3:4–7 – Hechos 2:21, 4:12, 10:43 – 2 Corintios 5:17 – 1 Timoteo 2:4
8.– CREEMOS que es la voluntad de Dios que cada creyente disfrute de la plenitud del Espíritu Santo, llegando a ser enteramente santiicado, sepa- rado del mundo y de la vida en pecado; consagrado enteramente a cum- plir con la voluntad de Dios, para una vida santa, recibiendo poder mediante el Espíritu Santo, para vivir con efectividad el servicio cristiano. Esta obra del Espíritu Santo en el creyente llamada santiicación, se reconoce como una experiencia después a la conversión.
Efesios 5:18 – Romanos 12:1–2 – 1 Corintios 1:2, 15:58 – Hechos 1:8 – 1 Pedro 1:15–16 – Levítico 11:44, 20:7
9.– CREEMOS que la obra redentora del Señor Jesucristo realizada en la cruz ha hecho también provisión para la sanidad del cuerpo mortal. La ora- ción por los enfermos y el ungimiento con aceite tienen validez para la Iglesia de nuestros días, siendo un privilegio el obedecerlo.
Isaías 53:2–5 – 1 Pedro 2:24 – Mateo 8:16–17 – Santiago 5:13–16 – Lucas 4:18–19
10.– CREEMOS que la Iglesia está formada por todos aquellos que creen en el Señor Jesucristo, y han sido redimidos mediante su sangre y nacen de nuevo por el Espíritu Santo. Cristo es la cabeza del cuerpo, la Iglesia el cuerpo de Cristo y ha sido comisionada por El, para ir por todo el mundo, como testigo en cumplimiento de la gran comisión de “ID Y PREDICAD EL EVANGELIO” y “HACED DISCIPULOS A TODAS LAS NACIONES”. La Iglesia local es un cuerpo de creyentes en Cristo que se reúne para la adora- ción a Dios, la ediicación del cuerpo por medio de la Palabra de Dios, la oración, la comunión, la proclamación del Evangelio y el cumplimiento de sus ordenanzas: el BAUTISMO y la CENA DEL SEÑOR.
Hechos 1:8, 2:42, 2:47, 4:32, 15:14 – Mateo 16:18, 28:18–20 – Efesios 1:20–23, 4:15, 5:23 – 1 Corintios 11:26 – Tito 2:14
11.– CREEMOS en la Venida de Cristo para arrebatar a su iglesia.
1 Tesalonicenses 4:16–17.
12.– CREEMOS que la Segunda Venida de Cristo a la tierra es inminente y será personal, visible, premilenial, para poner in a la gran tribulación y reinar por los siglos de los Esta es la esperanza gloriosa del creyente, constituyéndose en una verdad vital que lo impulsa poderoso a vivir una vida santa, fiel y de servicio excelente.
Mateo 24:29–30 – Apocalipsis 1:7 – Lucas 21:27